El fútbol argentino parece estar asociado irremediablemente a las polémicas. La más reciente, el despido de Diego Abal del cuerpo de árbitros de la AFA, se produjo como consecuencia de otra: el craso error que cometió aquel como encargado del VAR en el partido del sábado entre Gimnasia y Sarmiento, cuando se anuló un gol legítimo del “lobo” por una posición adelantada no sancionable de acuerdo al reglamento. En dicho encuentro, el árbitro Ariel Penel anuló el tanto a instancias del VAR, que había informado de una posición antirreglamentaria a la salida de un tiro de esquina. Sin embargo, existe una regla que indica que las posiciones adelantadas de los jugadores en los córners, laterales y saques de arco no son sancionables.
El desconocimiento de una regla básica despertó suspicacias sobre la actuación de Abal y de supuestos conflictos internos previos en el cuerpo de árbitros. Se rumorea que Federico Beligoy había propuesto a Diego Dóvalo como árbitro VAR internacional, puesto que al parecer le habrían prometido a Abal, quién quedó ofuscado por la situación. Por eso, hay quienes adjudican a ese encono el error cometido por Abal, en concordancia con sus asistentes, Gerardo Carretero y Gabriel Favale. Ante esto, la AFA decidió enviar una carta documento al primero para informarle su despido. No se sabe qué pasará con los otros dos, pero lo más probable es que no sean designados por un buen tiempo.
Ninguno de los implicados en el fallo que fue centro de la polémica el fin de semana fue designado para la nueva jornada de Liga Profesional, que comenzó anoche. Penel, los asistentes Ariel Scime (quien había avisado que no había off-side) y Daiana Milone, más el cuarto Ramiro López, quedaron excluidos de los cuerpos arbitrales confirmados para los duelos de la fecha 19.